jueves, 14 de marzo de 2013

pensamiento


la presente reflexión nace de dos experiencias básicas. Una, en clase de modelado, cuando el maestro se dedicaba a regañar a una compañera acerca de cómo si estaba en esta carrera debía desarrollar las cosas de esta carrera, conocer su futuro negocio y si no, básicamente la pregunta es qué estaba haciendo ahí… yo, a su lado, me daba cuenta de que dicho plática también me alude perfectamente a mí. puesto que yo no estoy seguro de mi carrera ni de mi triunfo como artista, situación a la cual me he enfrentado con resignación y conformismo por un lado, con consciencia de que pronto me dejará de apoyar económicamente mi madre, por otro.
            La segunda, en mi clase de pintura, cuando estaba frente a un cuadro pensando en qué carajo hacía ahí, donde no me gusta estar, me hizo reflexionar acerca de mis motivos por los que estaba ahí, que fue, en un inicio, una búsqueda de mejoramiento a nivel técnico para desarrollar mis proyectos, por lo cual me he puesto ha hacer mimesis; mi cansancio y frustración frente al desafío de lograrlo y el proceso que conlleva, tardado y laborioso; la conclusión de su relativa inutilidad cuando el arte que me gusta no está en torno a manejar una u otra técnica, sino de recurrir a uno u otro elemento según mis intenciones conceptuales… desde ese punto de vista pierdo un poco el tiempo. además de sólo alimentar, aparentemente, esta ideología de que si me cuesta y produce cansancio y es difícil de alcanzar, es valioso y su realización genera carácter y también vale… me pregunto de qué servirá eso cuando esté a punto de morirme.
            parece que la técnica y el valor de estar en la carrera y poder defenderme después están juntas… pero sólo a un pequeño nivel. el arte está metido en un circuito social, histórico, técnico y tecnológico, telecomunicativo, ideológico, cultural, institucional, mercadotécnico y económico, etc. y todo ello influye. no te haces artista de  tener buenas ideas, ni de ser creativo, es una creatividad desarrollada a largo plazo y enfocada en un ámbito estético junto con un proceso de mercado y comunicación social el que consagra no intelectualmente a un artista sino social y económicamente, y a esto me refiero a que puede vivir de su producción, que en mi caso, quiero que se compagine con procesos de desarrollo en matemáticas, economía, historia, ingeniería y publicidad, además de viajar y disfrutar, sin drogas, de preferencia.
            entonces; ¿asumirte como artista es asumirte dentro de la tradición del arte? cada vez que voy a pintar noto que me siento angustiado y agobiado pensando con fastidio en la clase, siento que no  hago lo que quiero y pienso que debo tener buena técnica para tener calidad en mi trabajo. esto implica, hacer muchas cosas que no quiero. Cuando, en cambio, pienso en cambiar de plan, y ponerme a hacer las cosas que yo quiero, y que mis profesores me ayuden a desarrollarme dentro de ese ámbito de obra plástica, ya no pienso en eso, soy más espontáneo, lo disfruto más, y la legitimidad de mi trabajo parece no provenir de la calidad del producto físico, sino de la calidad del producto conceptual, su capacidad lingüística para transformarse en ideas nuevas, en placer. Agarrar símbolos ya existentes, sacarlos de su contexto y reutilizarlos para que por su nuevo contexto se transformen, al relacionarse con otros símbolos. Yo doy por hecho que eso es arte. Entonces creo que soy genial, porque me divierte y gusta lo que hago, no sé si hago arte pero me late, entonces el problema muchas veces viene cuando de repente me piden que justifique mi proyecto, entonces siento con frecuencia que mis verdaderos motivos son suficiente, y tiendo a inventar algo parecido a lo que ya existe. funciona. sin embargo no quedo satisfecho, primero, ¿por qué unos motivos son superiores a otros? segundo, ¿qué es arte?. distingo por lo menos tres procesos creativos en mi obra, donde el tercero es una combinación de los otros dos. en realidad son cuatro si consideramos que pienso en obras donde el significado lo pienso a partir de nuevas experiencias en la vida. los procesos son a partir de la ocurrencia de algo que me parece chido, precedido por expresiones “estaría bien fino hacer esto o aquello”,  que a veces tiene que ver con hacer algo plásticamente bello y otras veces con realizar algo conceptualmente sostenido en algo plástico de forma ingeniosa. sino tiene un concepto y es algo genial, casi me indigno de que me pregunten si tiene un concepto y de que lo desprecien si no, ¿que no ven que está genial?
            Cuando me dicen que los  justifique caigo en una dinámica similar a la de la pintura donde la técnica te valida y te hace entrar a un ámbito jerárquico, donde obviamente necesitas que otros te acepten porque la sociedad del arte sigue siendo jerárquicamente estructurada, es un poco antigua. en ella el símbolo de la justificación es un símbolo relativamente nuevo que pertenece al símbolo arte, un criterio que delimita una línea de la forma del arte. El arte, como el dinero, y los valores morales, son ideas, y están realizados a partir de símbolos de los delínean y les dan forma para ser reconocidos. Hacer arte, ser un inversionista en la banca y un monje tienen algo en común, estás en un intercambio de valores, ése es tu trabajo. El símbolo justificación forma parte del símbolo arte que forma parte del símbolo sociedad que forma parte del símbolo de la ideología de que nada se hace sin que tenga sentido, que da sentido al símbolo de sociedad occidental y que forma parte del sistema de trabajo capitalista, que ayuda a crear más símbolos, valor capital, que es real, desde la percepción que simboliza la realidad. Es un juego de fantasmas, puesto que son representaciones que juegan a distorsionar y sustituir la realidad.
            Es un símbolo que valida u otro para crear otro símbolo que valida la primero pero que niega al segundo sin el cual el tercero no puede ser y que no permite que existan los demás, haciendo del sistema un absurdo y una contradicción, para que el símbolo haga su papel de representación para que finja que es real. Y entonces, ésta empieza a desaparecer. Como sucede cuando alguien nos explica algo y le creemos.
Los actos de fe continúan constantes, y vivimos con ellos. Es más, si todo es subjetivo, la realidad no existe, porque nadie puede llegar a ella sino sólo mediante la subjetividad, la realidad vienen siendo la subjetividad, la emocionalidad y los sentimientos. Si nadie puede llegar a la realidad sino sólo a una percepción de la misma no podemos afirmar que existe, tampoco tiene sentido hablar de ella. Si, en cambio, la realidad es subjetiva entonces todo es real y la realidad es a la vez un símbolo de nosotros. La realidad es una forma de percepción característica.
            La realidad simboliza lo exterior en donde se encuentra nuestro interior. La realidad nos contiene (¿?) “yo estoy dentro de la realidad”; si esto es así, entonces la realidad es como un recipiente donde yo estoy dentro; so, whats out side? A menos que no sea como yo pienso los recipientes. Ahora, una bolsa tiene su interior y si se le voltea el interior queda en el exterior            y lo que estaba adentro queda afuera. Si seguimos llamándole como interior a esta parte ahora sensiblemente afuera y a exterior como lo que ahora está adentro quedamos en la imagen de lo que yo pienso que es el afuera. Lo interior. El interior de los objetos, por ejemplo, el interior es lo oculto a nuestros sentidos. donde la razón actúa para traducir a código sensible lo imperceptible. La ciencia hace eso. Mi razón y la de cualquiera que lea hace eso. Nuestro cerebro mediante códigos traduce lo sensible a razonal y lo razonal a sensible. Podemos sentirnos alegres y prepotentes antes de tener que lavar otro traste.
            Pero la realidad del símbolo es su reconocimiento, no tomar conciencia, sino percibirlo como realidad en vez de cómo símbolo. Si se lo quito, todo es código. La realidad de los pigmentos que forman el símbolo que hago al pintar es otro símbolo, es mi percepción de su realidad. Soy yo. Yo no veo la realidad veo la representación que mi cerebro hace de la realidad. Con mi percepción percibo mi percepción de lo de afuera, donde afuera también es otra percepción. Hay recursividad o tautología por donde le veas. ¿puedo saber de la realidad? no sé, pero se me ocurre que si supiera cuánto distorsiono la realidad matemáticamente puedo crear modelos que puedan ser sensibles a mis sentidos para percibir cómo según un proceso es la realidad. Como pensar que no hay colores sino los absorbida y reflejada.
            Todo esto viene a algo más. Quererme salir de la enap así como dejar de hacer el cuarto obscuro sería realizar otro símbolo, el de lo correcto frente a dejar de hacer algo que no me gusta (otro símbolo), porque esto me aterra, aunque me da estabilidad. Entonces, un sociólogo decía que la comunicación es una coordinación de acciones. yo pienso que igual pasa en el arte y mi conducta con respecto a los símbolos, realizo lo que es símbolo de lo bueno, porque además tiene soporte en sus consecuencias positivas a mí. Deshecho lo demás. Ya no le hablo a una chica porque me sentir inestable y amenazado.
            Oh sorpresa, no es tan abstracto como simples símbolos, está la subjetividad de lo real, o sea, mis emociones y sentimientos. Si dejo la enap sentiría mucho vértigo ante la realidad de trabajar sin título, sólo me queda un año y medio. no estoy aprendiendo una profesión que se caracterice por ser de fácil explotación. Está cabrón la artisteada. Tengo que encontrar el contexto más sensible a ella y donde mejor explote yo con ella. El contexto del valor dinero, del intercambio de símbolos. Antes, en otro tipo de sociedades, incluso en la nuestra en otra estructura como la familiar los intercambios se hacen a otros niveles de símbolos. Me cuida mi madre ante el símbolo de la obediencia, por ejemplo. El otro contexto es el de mi libertad. Salirme de la enap también sería irme a golpear contra la pared de la impulsividad frente al vértigo y nervios y emoción de mi libertad.

sábado, 9 de marzo de 2013

uhhhh!!!
soy la persona más popular de los blogss!!
conmigo, como principal visitante...
después estoy yo
y más allá, creo sigo yo


la dolorosa vision que de esto se desprende me lleva a la reflexión. si realmente fuera visitado, seguiría estando solo, visitando este blog viendo si alguien me escribe algo.
en un museo es lo mismo. expones y simplemente no sabes qué sucede con tu obra... te expones al vacío.
después haces un currículum con todas las exposiciones que has hecho en lugares cargados de significado y que en realidad no creo que cambien tu vida mucho. no sé realmente pero desde punto de vista, no le veo tanto sentido a ser artista. cuando en mis clases de historia revisamos cuáles son las implicaciones sociales en torno al arte uno entiende que por más pequeños que sean tus actos un enramado social se relaciona frente  a esto, con su propia estructura, y que incluso yo lo hago en torno a  otras cosas. de lo que se desprende que el arte sólo es consecuencia de otras cosas, una forma de estructurarse