miércoles, 28 de noviembre de 2012


Desde que sucede la autonomía del arte con el avance de la sociedad burguesa se van separando progresivamente los componentes del arte; su parte sensible, su parte razonal, su producción, el productor, hasta el receptor; dilatándose en un proceso que de difusión masiva. El individualismo brota, y la identificación de los objetos de arte se hace, asimismo, individual.  
            Como efecto contraproducente y paradójico, el artista deja de buscar la autosatisfacción. El capitalismo en el arte se manifiesta en la competencia. Yo temo que me deje de espejear en mi propia producción, y de que caiga en la ironía de volverme monótono dentro de la creatividad. Por eso pienso en otro sentido, en no buscar simpatizar, más que a mí mismo, lo cual puede hacer que sólo haga cosas artísticas o estéticas cuando me dé la gana, no como profesión. Por lo menos, pensar en otras opciones me abre un poco el panorama

martes, 9 de octubre de 2012

me di cuenta de algo. Desvaría, creo que no sólo yo, pensando mucho acerca de mi especialización del trabajo, el artista haciendo arte. Más que una ventaja acerca de mi propia movimiento, siento que es susceptible de enceguecerme esta mirada. Siento que una persona puede hacer lo que sea, siempre y cuando cuente con los recursos y disposición, y definirte acerca de cómo te consideras en cierto momento (lo cual aplica para toda la auto imagen con todos sus detalles, sexualidad, esfuerzo, profesión, amigos, etc.), puede llevarme a sólo querer restringir mi vida a un tipo de actividades, limitando así mi desarrollo más integral. Por un lado tengo miedo de que no se me considere artista, por el otro pienso que si por esto dejo de hacer cosas que me interesan la cagaré. Me interesa el ser multidisciplinario, aunque prácticamente esté por los suelos, lo cual implica que haré un poco de cada cosa. quizá también en una búsqueda de mí y de desarrollar mis poder.
de repente lo dicho por eduardo me sacó de jugada.
es cierto, no sólo se trata de pensar, el pensamiento, sin acción, no es más que una chaqueta.
últimamente he estado produciendo en fotografía, y de hecho ha poco tuve una experiencia en la cual mi maestro de pintura me sugirió otro para hacer lo que pretendía. Hasta ese momento había sido hacerme güey con cosas que no me había propuesto. Ahora toca juntar teoría y actos, y arriesgarme a errar, sino me arriesgo, yerro de entrada.

jueves, 20 de septiembre de 2012

despiera...

DESPIERTA


Esto es para mí. 
No he tenido la suficiente organización y sólo pensar en ello me tensa, 
ya he dormido un poco así que no me siento tan agotado.
Comienzo con la reconstrucción del blog y continuo para ver qué pedo.
En cuanto a mi obra debo respirar. Encontrar los caminos, y darle. Ahora estoy en mi estructuración
fotográfica, y no me siento libre, pensando en las cosas del cch, aún.
Por otro lado veo el arte quizá como un hobbi, un hobbi serio pero extraño, tengo interés en hacer mis proyectos, después no sé qué venga, platicar y platicar sobre lo que es el arte no me llena, ver quién tiene más saliva, quién se impone a quién, y, si el arte es liberarse, por qué pensar en el arte como algo que hacer toda la vida, cómo tener noción de lo que haré toda mi vida si no es más que noción. Igual pienso que debe suceder con cualquier otra actividad humana, se te antoja hacer algo por cierto tiempo, de forma espontánea y efímera, quizá visceral. Después no sé, si no es por el gusto propio o fines prácticos no entiendo bien por qué leer desmedidamente, por qué volverme una biblioteca andante. La verdad no entiendo bien qué onda en mi vida, ni siquiera los planteamientos del solipsismo con respecto a mí, menos la relativa importancia de las cosas en mi vida. Si se están matando todos del otro lado del mundo, ¿por qué eso es importante para mí, en qué medida, actuar por ello, qué pex?